La remontada de Del Potro es una página más de la historia del US Open, su torneo preferido, pero el hecho de que lo lograra disminuido físicamente a causa de la gripe, le da un toque de hazaña deportiva que podría clasificar entre lo más notable del año.

 "He jugado un partido épico en mi torneo preferido, delante de un público fantástico, ante uno de los mejores jugadores del Tour. ¿Qué más puedo decir?", expresó. 

Ahora se apresta a un encuentro en cuartos de final contra el gran Roger Federer. Será un partido revancha, pues Del Potro derrotó al suizo en la final del US Open de 2009, para ganar el único título de Gran Slam de su carrera. 

"Será un partido interesante y después de años nos volvemos a encontrar en cancha central de este torneo, pero no puedo decir como le voy a jugar, cuan físicamente bien me voy a sentir porque frente a él no valen planes, solo que me voy a enfrentar al mejor hombre en la historia del tenis", manifestó el argentino. 

Momentos antes, Federer había dicho a los periodistas que le gustaría jugar de nuevo aquella final de 2009. 

"Me gustaría volver a jugar ese partido porque por ahí tengo la solución para ganarle", dijo Federer, a lo que Del Potro respondió: "Pues yo no quisiera jugarlo porque estuve muy cerca de perder. Mejor dejarlo así". 

Ahora el argentino disfrutará de un día de descanso, antes de regresar a la cancha el jueves para topar con Federer.

"Me siento cansando, antes del partido recibí masajes y medicamentos. Afortunadamente, tengo todo el día de mañana para recuperarme y espero estar en buenas condiciones para enfrentar a Roger", indicó. 

"Si me levanto mejor me va hacer bien entrenar, porque me conviene transpirar para sacar un poco lo malo de adentro", manifestó.

Además del Juan Martín Del Potro, otro argentino estará jugando cuartos de final de US OPen, Diego Schwartzman, que enfrenta el miércoles al español Pablo Bautista AGut por el pase inédito de ambos a semifinales.