BELGRADO -- Momento de ensueño para Novak Djokovic, que apara la atención de los medios de cualqueir índole. Campeón de Wimbledon + número uno del mundo + casamiento, ecuación perfecta para llamar toda la atención.
El deportista, de 27 años, y Jelena Ristic, de 28, novios desde la adolescencia, se casaron en una ceremonia celebrada en una iglesia en Sveti Stefan, una diminuta península de la costa adriática de Montenegro y rodeados de la familia. "Viéndola por primera vez con su vestido de novia, sonriendo y caminando hacia mí, se parecía a un ángel", declaró "Nole" a la revista británica "Hello!".
Djokovic explicó que durante la ceremonia trató de "memorizar ese momento" y centrar su atención en "ella, en su sonrisa" y en su futuro, añadió en referencia al embarazo de Ristic. "Estaba muy nerviosa y todo estaba borroso. Yo le veía a través de las lágrimas y empecé a llorar en cuanto le vi", intervino la recién casada sobre su ahora marido.
Ristic, mientras tanto, reconoció que estaba tremendamente feliz y que "el embarazo hace más difícil controlar las emociones", al tiempo que se declaró "bendecida" porque "no podría pedir un compañero mejor que él".
Por deseo de la pareja, las fiestas nupciales, que se celebraron el pasado miércoles y jueves, también tuvieron lugar en un ambiente de intimidad, sin publicidad ni cámaras, y entre grandes medidas de seguridad, sin que se filtraran ni los nombres de los 140 invitados. Aunque se supo que estuvieron Boris Becker, Marian Vajda, Janko Tipsarevic, Viktor Troicki y Nenad Zimonjic, entre otros.
Para Novak, el hecho de que la boda se celebrase después de su victoria en Wimbledon, donde derrotó en la final al suizo Roger Federer, hizo que estos eventos fueran aún "más especiales". "Gano Wimbledon y ahora me preparo para ser padre, no podría pedir más".
Fuente: espndeportes.com