SHENZHEN -- Se hizo esperar. Y lo tuvo que sufrir. Andy Murray estuvo contra la pared en el segundo set, con una desventaja de 6-2 en el tie break, pero salvó cada uno de los match pointen contra (cinco en total) y se terminó quedando con el título de Shenzhen, su primer festejo ATP en 15 meses. La consagración, ante Tommy Robredo (22°) por 5-7, 7-6 (9) y 6-1.
Las cinco bolas de partido levantadas por el escocés y la extensión del duelo a un tercer set fueron demasiado para Robredo. Un golpe anímico determinante. Murray no perdonó: apenas cedió un punto con su servicio y quebró en tres ocasiones (100% de efectividad) para cerrar la historia en poco más de dos horas y 30 minutos.
Con el éxito, el escocés, que mantendrá su undécimo lugar en el ranking, dio un paso importante de cara a la carrera a las Finales ATP, donde busca clasificarse por séptima vez consecutiva. Con los 250 puntos por el título, subió a la décima plaza y quedó a solo 150 puntos de Tomas Berdych, dueño por el momento del octavo y último lugar clasificatorio a Londres. El ATP 500 de Beijing y el Masters 1000 de Shanghai, sus próximas escalas.
En el camino al título, Murray dejó en el camino a Somdev Devvarman, Lukas Lacko, Juan Mónaco y Robredo. El español, por su parte, que no gana un título desde Umag 2013, había dejado en el camino a Sam Groth, Andreas Seppi y Santiago Giraldo.
Fuente: espndeportes.com