DANI POZO / AFP
El español Rafael Nadal, ídolo local pero lejos de su mejor nivel esta temporada, tiene una buena ocasión para remontar el vuelo en el Masters 1000 de tenis de Madrid, que comienza el domingo y donde no participa el número uno mundial y hombre más en forma del momento, el serbio Novak Djokovic.
La baja de 'Nole', que prefirió no viajar a España y descansar antes de los torneos de Roma (10-17 mayo) y Roland Garros (24 mayo-7 junio), parece incrementar las opciones de ser campeón de Nadal, vigente campeón, aunque para ello tendrá que mejorar lo demostrado hasta ahora.
El año 2014, marcado por problemas físicos y de salud (espalda, muñeca, apendicitis) ha dejado paso a un 2015 donde Nadal no ha conseguido ser el tenista eficaz y seguro que todo el mundo conoce.
Sólo ha conseguido un título, en Buenos Aires, y sufrió eliminaciones pronto en Indian Wells (cuartos de final) y Miami (tercera ronda).
Todos esperaban que volviera a ser la gran estrella en la temporada europea de tierra batida, su superficie favorita, pero no ha sido así.
En el torneo de Montecarlo, primero de la trilogía de Masters 1000 sobre arcilla, dio al menos una buena imagen antes de perder en semifinales ante Djokovic (6-3, 6-3). En la pista monegasca ganó al estadounidense John Isner y al español David Ferrer.
Pero Nadal recayó en sus propios errores días después en Barcelona. Cayó allí ante el italiano Fabio Fognini, que ya había sido su verdugo este año en las semifinales de Rio y que esa vez le superó por 6-4 y 7-6 (8/6), en los octavos de final.
"La semana en Montecarlo había sido la mejor del año, pero con ésta es al revés, una semana muy negativa. Es un desastre", admitió entonces Nadal.
En Madrid, la estrella española ha comenzado recibiendo el viernes de manos del presidente del gobierno Mariano Rajoy la Medalla de Oro de Mérito al Trabajo, una prestigiosa condecoración civil que puede darle confianza antes de intentar un tercer título consecutivo, después de sus éxitos de 2013 y 2014.
- Terreno minado para Federer -
Nadal, catorce veces campeón de un torneo del Grand Slam, también ganó en Madrid en 2005 y 2010, con lo que aspira a una quinta corona.
Es importante que llegue lejos en este torneo por los puntos que defiende y porque sería la ocasión perfecta para demostrar que sigue siendo el mismo, muy cerca ya de un Roland Garros en el que intentará un décimo título.
El cuadro no es sencillo. Podría tener que verse con el sudafricano Kevin Anderson, un gran sacador, en los octavos de final y en cuartos se cruzaría teóricamente con el suizo Stanislas Wawrinka, el búlgaro Grigor Dimitrov o incluso de nuevo con Fognini.
En semifinales, si la lógica se impone, el suizo Roger Federer, número dos mundial, sería el adversario, siempre que el tenista de Basilea se deshaga de los hombres que aparecen por su parte del cuadro, entre ellos John Isner en octavos o el checo Tomas Berdych en unos teóricos cuartos.
- Sharapova defiende corona -
Berdych, finalista en Montecarlo, forma parte de los 'outsiders' más destacados, junto al japonés Kei Nishikori, finalista en Madrid en 2014 y reciente campeón en Barcelona.
En la categoría femenina, la defensora del título, la rusa Maria Sharapova, tratará de revalidar su corona madrileña, después de fallar prematuramente en Miami y Stuttgart. Se encontraría en su parte del cuadro con la rumana Simona Halep, a la que superó en la final en 2014.
La número uno mundial, Serena Williams, campeona en Madrid en 2012 y 2013, se vio obligada a ser baja en cuartos el pasado año. En la actual edición tratará de sacarse la espina de aquella decepción.
Fuente:ll/ol/gca/dr/AFP