El australiano Jason Day logró su séptima victoria en el PGA Tour estadounidense el domingo para hacerse cargo del número uno en el ránking mundial, convirtiéndose en el tercer jugador en dos semanas en capturar el primer codiciado puesto del golf.
El jugador, de 27 años, terminó el domingo con 69 golpes para totalizar 261 y ganar por seis impactos el BMW Championship, el tercero de los cuatro torneos en los playoffs de la FedEx Cup.
"Todo lo que quiero hacer es ganar", dijo Day, que se ha impuesto en cuatro de sus últimos seis torneos, incluyendo su primer grande en el PGA Championship del mes pasado. "La de ayer y hoy fueron las rondas más difíciles que he tenido que jugar en mi vida".
Day comenzó su ronda final con una ventaja de seis golpes sobre un grupo lleno de estrellas que incluyó al irlandés Rory McIlroy.
El australiano les mantuvo a raya al quedarse fuera de problemas y asegurarse de que sostuvo su enfoque agresivo alrededor de los ´greens´.
Añadió unos birdies en buena medida, como el del hoyo 16 cuando logró un ´putt´ de 15 pies, y luego otro en su agujero de cierre para totalizar 262 impactos (-22).
Day dijo que el Campeonato Abierto de 2015 en St. Andrews en julio fue la chispa que necesitaba para enfocarse en ganar consistentemente.
"Desde el Campeonato Abierto algo cambió en mi cabeza y sentí como que era mi momento para empezar a ganar torneos. Desde entonces, ha sido una carrera fenomenal", señaló Day.
El estadounidense Daniel Berger logró una tarjeta con 69 golpes para terminar en el segundo lugar con 268 impactos, mientras que Scott Piercy (70) terminó tercero, a siete golpes por detrás de Day.
El norirlandés McIlroy (70), J.B. Holmes (68) y Rickie Fowler (69) empataron en tercer lugar con 14 bajo par (270).
El estadounidense Spieth disparó uno bajo par (70) en la jornada para terminar empatado en el decimotercer puesto.
Day se convierte en el australiano más joven en alcanzar el número uno y el tercero en la historia detrás de Greg Norman y Adam Scott.