La tenista estadounidense Serena Williams, N.1 del mundo, conquistó este domingo el Torneo de Roma al imponerse en la final a su compatriota Madison Keys, N.24 del mundo, por 7-6 (7-5), 6-3.
Serena Williams ya se había impuesto en las pistas del Foro Itálico en 2002, 2013 y 2014.
La tenista estadounidense Serena Williams, N.1 del mundo, conquistó este domingo el Torneo de Roma al imponerse en la final a su compatriota Madison Keys, N.24 del mundo, por 7-6 (7-5), 6-3.
Serena Williams ya se había impuesto en las pistas del Foro Itálico en 2002, 2013 y 2014. El año pasado no pudo participar por una lesión en el codo.
De esta manera, la número uno del ránking se reencuentra con la victoria, ya que no levantaba un trofeo desde el Torneo de Cincinnati, en agosto de 2015. Desde entonces había perdido las dos finales que había disputado: Abierto de Australia e Indian Wells.
"Es fantástico volver a ganar, pero solo jugué cuatro torneos desde mi último triunfo. No es igual que como si hubiese jugado rodas las semanas", recordó Serena, que alabó a su rival.
"Madison es muy potente y he logrado controlar eso, a ser regular y a aprovechar mis oportunidades. Es una jugadora muy buena, creo que con potencial para ser una número uno", dijo en conferencia de prensa.
A una semana del inicio de Roland Garros, la pequeña de las hermanas Williams ha completado una buena semana de preparación en Roma y el mayor sobresalto que tuvo de camino al título fue el pasado miércoles, cuando tuvo que llamar al médico tras haber ingerido... comida para perro.
La final de este domingo no fue buena, ya que ambas jugadoras cometieron muchas faltas directas: 56 en total, 32 por parte de Keys y 24 por Williams.
Serena, de 34 años, hizo valer su mayor experiencia en este tipo de partidos ante su joven rival, de 21, pese a que Keys ganó esta semana a dos Top 10: la checa Petra Kvitova (cabeza de serie nº 5) y la española Garbiñe Muguruza (N.3).