Si alguien dudaba de qué disposición iba a traer hasta Río de Janeiro la número uno del mundo Serena Williams, después de lo que ha dicho en la rueda de prensa del equipo americano a su llegada a Brasil, es complicado que lo siga haciendo. La de Michigan va a por todas, con muchas ganas de volver a colgarse la medalla de oro, tanto en individuales como en dobles, así como ocurriera en Londres 2012. La gasolina parece no acabársele a Serena a sus 34 años.
"Me encanta lo que hago, lo hago todos los días y disfruto estando en la pista", contaba la menor de las Williams en su primera rueda de prensa en Río como plasma en su web la WTA. "Disfruto competiendo yahora mismo no veo el momento en el que diga, 'no quiero seguir más'. Cualquier cosa que hago, ya sea jugar al tenis o lo que sea, la hago dando mi máximo. Es eso exactamente lo que me llevo a la pista todos los días", asegura.
Serena ha gozado de un merecido descanso tras ganar su séptimo Wimbledon. Pero reconoce que no ha pensado mucho sobre ello. "Normalmente paso página y me centro en el siguiente gran torneo. Y especialmente con Río tan cerca, que era mi principal ojetivo, tengo que asegurarme de estar preparada para jugar los Juegos", cuenta la estadounidense que abrirá fuego en las pistas del centro olímpico de tenis de Barra ante la australiana Daria Gavrilova.
Los Juegos Olímpicos son siempre algo especial para los tenistas y más si cabe para Serena con el historial de triunfos y grandes momentos que ha vivido en ellos desde que debutara allá por Sídney 2000 siendo aún casi adolescente. "Jugar los Juegos es totalmente distinto. Juegas para tu país. Cuando me hice con mi primera medalla de oro, sentí algo que nunca hubiera imaginado. Tuve la oportunidad de disfrutar verdaderamente y valorar mi oro más que cualquier otro trofeo que haya ganado", afirma Serena. Además, está su participación en los dobles junto a Venus. Han ganado la medalla de oro en las tres ediciones de los Juegos a las que se han presentado (Sídney 00', Pekín 08' y Londres 12').
"Nosotras tenemos la opción de contar con alguien en el circuito que entiende perfectamente por lo que una está pasando. Es una gran experiencia, muy divertido, lo disfrutamos y no creo que haya nada comparado con esto", cree que la americana.
Para la discípula de Patrick Mouratoglou será la segunda ocasión que pise suelo brasileño tras una exhibición disputada en Sao Paulo hace algunos años. No le preocupa demasiado el tema de la seguridad y toda la controversia sobre el virus del Zika. "Lo sopesé mucho. Creo que todos aquí nos hemos preparado bien e informado sobre lo que hacer y cómo actuar en cualquoer situación. Estamos preparados y listos", afirma.