El alemán Dustin Brown, conocido en el circuito como 'Dreedy' (el 'Rastas') dijo este domingo adiós al sueño olímpico de la peor manera, lesionado, dejando al torneo de Rio de Janeiro-2016 sin uno de sus jugadores más peculiares.
Tras ganar el primer set al brasileño Bellucci y cuando sacaba para empatar a cinco juegos el segundo, Brown se torció el tobillo izquierdo al subir a volear a la red.
Sus signos de dolor, retorciéndose en la pista de la pista central del Centro Olímpico, dieron paso a las lágrimas cuando se dio cuenta de que no podría continuar. Después de que el fisio le vendara el pie dañado, intentó continuar, pero apenas aguantó un intercambio. Casi no podía andar para acercarse a la red y estrechar la mano de su rival.
Brown nació en Alemania hace 31 años, de padre jamaicano y madre germana. Comenzó como profesional en 2002 defendiendo los colores de Jamaica, un país sin tradición tenística, por lo que pronto se convirtió en el mejor jugador de la isla caribeña.
En 2010 fue invitado a jugar en Wimbledon, convirtiéndose en el primer jamaicano en jugar en la hierba inglesa 36 años después de que lo hiciera su último compatriota, un tal Richard Russell.
Ese mismo año, harto de la falta de apoyo económico y de logística de Federación Jamaicana de Tenis, el paisano de Usain Bolt decide renunciar a seguir defendiendo los colores del país caribeño y adopta la nacionalidad... ¡británica!. Por uno de sus abuelos paternos.
Pocos meses después volvió a cambiar de opinión y decidió jugar al fin por su país de nacimiento.
- Carismático, pero sin títulos -
Nunca ha jugado una final de un torneo ATP y apenas cuenta con dos torneos en dobles. Su mejor clasificación en el ránking fue el 78 en 2015 (actualmente es el 86) y en el circuito no solo destaca por su imagen, sino por su estilo de juego un tanto suicida, jugándose golpes directos a la mínima ocasión.
Eso le lleva a ganar a casi cualquier jugador en un buen día (al español Rafael Nadal le ha derrotado en un par de ocasiones), pero también a 'tirar' muchos partidos.
En los torneos destaca por su peculiar imagen: largas rastas que a veces, como en Rio, recoge con un gorro de lana (pese a que en la ciudad brasileña se rondan los 30º este domingo), y varios pendientes y 'piercings' adornan sus orejas.
Pero también es reputado por su sentido del humor. Tras abandonar la pista en Rio, publicó un mensaje en Twitter para agradecer las muestras de apoyo recibidas por sus seguidores (más de 70.000 en la red social), con una foto de su tobillo tomada ¡mientras le estaban atendiendo en la cancha!.
mcd/ma