La puertorriqueña Mónica Puig, que ganó la final femenina, y el argentino Juan Martín del Potro, finalista en categoría masculina, fueron los protagonistas de la penúltima jornada del tenis de Rio-2016, que pasará a la historia del tenis latinoamericano.
Puig, de 22 años, mejoró el resultado de la argentina Grabriela Sabatini, única mujer latinoamericana que había obtenido hasta ahora una medalla en el 'single' (plata en Seúl-1988), tras imponerse en la final a la alemana Angelique Kerber, número 2 del mundo, por 6-4, 4-6 y 6-1.
"¡Viva Latinoamérica!. La voy a representar hasta que me muera. Ojalá esto sirva para que enseñe a todas las mujeres latinas que todo se puede conseguir en la vida", dijo la tenista ante los periodistas.
La puertorriqueña ha jugado en Rio la mejor semana de su aún corta carrera (22 años). Con el paso de cada eliminatoria, la joven fue ganando una confianza y una seguridad en su juego impropia de una jugadora cuya clasificación más alta en el ranking mundial es el puesto 34º, alcanzado precisamente antes de la disputa de los Juegos.
"Puse mi corazón y mi alma en la cancha", dijo Puig para explicar el éxito de una tenista que solo cuenta con un torneo en el circuito (Estrasburgo-2008).
Kerber acabó desesperada al ver que su rival golpeaba todas las bolas a las líneas, con una potencia y una velocidad que desarbolaban la resistencia de la germana.
- Llantos en el podio -
Los llantos de Puig en el podio, le impidieron cantar la Borinqueña, el himno de Puerto Rico, que sonó por primera vez en la historia de los Juegos. Es además la única mujer en su país en haber ganado una presea olímpica.
Si el triunfo de Puig es sorprendente, también lo es la clasificación de Del Potro para la final masculina del domingo, en la que se enfrentará al británico Andy Murray, número 2 mundial y vigente campeón olímpico.
Y no porque a 'Delpo', ganador del US Open-2009, le falte calidad, sino porque aún trata de recuperar el nivel que le llevó al 4º puesto de la clasificación mundial en 2010, después de pensar en abandonar el tenis en 2015 por una lesión en la muñeca de la que no se recuperaba.
La semifinal de este sábado ante el español Rafael Nadal quedará en los anales del tenis olímpico, por el nivel de juego, pasión y emoción demostrado por ambos jugadores.
Tras tres horas y ocho minutos de un juego de altísimos quilates, el tandilense se llevó la victoria por 5-7, 6-4 y 7-6 (7/5) y se aseguró, al menos, la medalla de plata, la 10ª en la historia del tenis latinoamericano.
"No puedo creer estar en la final y con una medalla y más cuando vi el sorteo con Djokovic (primera ronda). Pensaba más en el asado en Tandil, pero ahora me voy a comer el asado con una medalla colgada", dijo Del Potro, que ya había arrebatado al serbio la medalla de bronce en Londres-2012.
- Apoyo albiceleste -
Del Potro contó con el aliento de su fiel hinchada albiceleste, pese a que la mayoría del público de la central del Centro Olímpico de tenis de Barra apoyaba al español.
"Las piernas no me dan para más, pero cuando miro fuera (a las tribunas) y veo a toda esa gente, como que me ayuda a correr más", dijo el argentino tras una semana intensa y muy emocional.
Dado el estado físico del argentino, con el primer set ganado por Nadal, el partido pareció decantado para el español, pero la 'Torre de Tandil' se elevó más alto que nunca para llevar el partido a tres sets y ganarlo en el 'tie-break' definitivo.
"En el deporte uno tiene que ganar y el otro tiene que perder y a veces es por pequeños detalles. Y hoy ganó él por una diferencia de dos puntos en el 'tie-beak'. Hay que felicitarle", dijo Nadal, que aspiraba a lograr su segundo oro olímpico.
Antes de los Juegos, cuatro jugadores aspiraban a esta cita histórica: Murray, Nadal y las hermanas Williams. Ahora ya solo es el británico el que puede inscribir su nombre en la historia del tenis olímpico como el único jugador con dos oros en 'singles'.
Venus Williams, al menos, se clasificó para la final del dobles mixtos y aspirará a una quinta medalla olímpica, algo que tampoco ha alcanzado nunca ningún otro tenista.
mcd/ol