Las cosas no van del todo bien alrededor de Marcelo Ríos. El que fuera número 1 del mundo a finales del siglo pasado no está cómodo, no es feliz con su situación actual y por eso ha decidido dar un cambio radical. Según una entrevista publicada por la Revista Caras, el chileno habría pensado dejar atrás su país natal e irse a vivir con su familia a los Estados Unidos, un lugar donde no sufra tanta persecución de la prensa, donde cada acción suya no sea juzgada al milímetro al día siguiente. Pero lo mejor es la manera en la que el propio jugador explica sus motivos, no se lo pierdan.
“Quiero estar en paz un tiempo. Luego de la vasoconstricción cerebral que tuve, me dijeron que no puedo estresarme o vivir momentos tensos, por lo que me impidieron casi trabajar. Me recomendaron quedarme en mi casa lo más tranquilo posible… Por otro lado, uno de mis trillizos (Marcelito) tiene un problema broncopulmonar, por eso todos los inviernos arrendamos casa en Sarasota y nos vamos por un mes”, confiesa Marcelo, totalmente convencido de dejar Chile atrás, al menos durante un año.
“Este año le propuse a Paula irnos tres meses y ella me dijo un año. Lo pensé y concluí que Marimay lo puedo manejar desde allá, y mi papá puede ayudarme aquí. Mi señora estudiará inglés, mis hijas irán al colegio, Marcelito quiere jugar fútbol y yo trataré de entrenar a alguien o hacer algo que me entretenga”, asiente el campeón de 18 títulos profesionales, ahora empresario aunque también relacionado con algunos asuntos del deporte que se lo dio todo.
"Me siento atacado en este país. Mi mujer también está aburrida de Chile, de la vida que llevo, de las mentiras de la prensa, de que inventen cosas”, añade el ‘Chino’. “No entraré en detalles, pero para mí todos los periodistas son la misma mierda. No hago diferencia entre los de farándula o de deporte que hablan sin saber... Ya no pico como antes. Han mentido mucho, me hicieron mucho daño cuando era chico. Desde entonces no pesco a la prensa y por eso soy el tipo pesado. Todos esos gallos por sacar una noticia son capaces de cagar a una familia", sentencia.
Una serie de hechos que le han llevado a cambiar de rumbo de manera drástica sin pensarlo. “Me estresa, lo paso mal, no me gusta ni me siento tranquilo; mi señora lo mismo. Después de la vasoconstricción cerebral quedé con angustia por las cosas fuertes que los doctores me dijeron que posiblemente no me iba a morir, pero podía quedar ciego o cojo. Cuando tienes hijos te afecta, ¡me asusté! Estuve yendo al psiquiatra quien me aconsejó para qué esperar a ser viejo para irme, por qué no lo hacía ahora si tenía la plata, mi familia y los medios. Que realice hoy las cosas sin esperar a los 70, y me hizo sentido. Hablé con Paula y me encontró razón. Vivir en Chile es difícil para un ídolo. Tenemos pocos, sin embargo, tratan de tirarlos para abajo”, indica.
Por suerte, Ríos tiene una persona a la que aferrarse, la protagonista principal de su viaje. Su mujer. “He crecido a su lado, me ha ayudado a darme cuenta de hartas cosas. Tuve dos fracasos matrimoniales que me sirvieron para aprender de errores pero que no me marcaron como sí me ocurriría si me separara de ella. Paula más que una señora ha sido una amiga, entendió desde el principio mi vida. Siempre ha estado cuando la he necesitado. He pasado bastantes cosas malas y siempre es ella quien acude. Tengo pocos amigos, pero no los necesito”, asegura con pasión.
Un tipo diferente, apasionado y que no acata leyes ni órdenes. “No tengo límites y nadie me los pone tampoco. Sin embargo, he cambiado, me cuido más, trato de no hacer tonterías e intento ser más cariñoso. Antes era cero cariño, solo yo, yo, yo; me las creía todas. Ser número uno a los 20 años, tenía el mundo a mis pies… Nadie te enseña cómo llevar eso, yo lo hice a mi manera”.
Fuente : http://www.puntodebreak.com/2017/05/06/marcelo-rios-periodistas-son-mierda