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La final femenina del Abierto de Australia opondrá a las dos primeras del ránking mundial, la rumana Simona Halep y la danesa Caroline Wozniacki, que superaron este jueves las semifinales y se enfrentarán el sábado en Melbourne.
Halep, número uno mundial, eliminó a la alemana Angelique Kerber en un apretado partido de tres sets, tras salvar dos bolas de partido, por 6-3, 4-6, 9-7. Antes, Wozniacki se había desembarazado más fácilmente de la belga Élise Mertens, por 6-3, 7-6 (7/2).
Ambas tenistas, que buscarán el primer título de su carrera en Grand Slam, jugarán su primera final en Melbourne y la tercera de un torneo mayor. La ganadora será número uno mundial el lunes.
Halep, de 26 años, salvó los dos puntos de partido en el tercer set, pero antes había desaprovechado, durante su servicio, dos puntos match-balls que le hubieran permitido ganar el tercer set 6-4.
"Fue muy duro, todavía estoy temblando. Disputar dos partidos como éste, en el mismo torneo, no es fácil", declaró la tenista rumana.
En la tercera ronda, Halep había ganado tras salvar tres puntos de partido frente a la estadounidense Lauren Davis.
Frente a la alemana Kerber, 29 años, Halep jugó en forma muy ofensiva, marcando 20 de los primeros 25 puntos del partido.
Pero Kerber reaccionó, recuperando su juego, el que le había permitido en 2016 triunfar en los abiertos de Australia y Estados Unidos y ocupar el primer lugar de la clasificación WTA.
El fin del partido, tenso, con las tenistas aguerridas a pesar del agotamiento, colmó las expectativas del público del estadio Rod Laver Arena.
"Parecía una montaña rusa, pero no renuncié. Debo decir que estoy muy orgullosa", dijo Halep, que ganó gracias a un mejor saque (seis aces) y un juego más eficaz, logrando más puntos ganadores que su rival, 50 contra 33.
Wozniacki avanza sin sobresaltos
Por su parte, Wozniacki pasó a la final con más facilidad, derrotando a la belga Mertens (N.37) en dos sets.
Hace siete años, la danesa, que lideraba entonces la clasificación WTA, perdió en semifinales en Melbourne tras haber tenido una bola de partido contra la china Li Na. Un recuerdo que, según ella, la seguía atormentando en la actualidad.
La historia estuvo a punto de repetirse este jueves. Cuando parecía dominar totalmente el encuentro y ganaba 6-3, 5-4, 30-0 con el saque a favor, la duda se apoderó de ella. Cometió dos dobles faltas y permitió que Mertens igualara el segundo set a 5-5.
"Suelo ser tranquila, pero en ese momento mis piernas temblaban, ya no sabía que hacer. El partido contra Li Na seguía en mi cabeza", confesó la jugadora de 27 años.
Mertens, la invitada sorpresa de las semifinales, recuperó la confianza tras un partido en el que había fallado casi todo.
En unos minutos tomó la ventaja y tuvo incluso dos bolas de set a 5-6, 15-40, en el saque de la danesa.
Wozniacki logró sin embargo superar su bache y acabó imponiéndose en el tie-break.
La rumana y la danesa han disputado dos finales del Grand Slam cada una.
Halep perdió las finales de Roland Garros en 2014 y 2017 y Wozniacki la final del Abierto de Estados Unidos en 2009 y 2014.